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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
 PODER JUDICIAL
 EN SU NOMBRE
 TRIBUNAL DE MUNICIPIO ORDINARIO Y EJECUTOR DE MEDIDAS DEL MUNICIPIO EL
 PAO DE SAN JUAN BAUTISTA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO
 COJEDES
 -IIDENTIFICACIÓN DE LAS PARTES Y DE LA CAUSA
 SOLICITANTES: SERGIO LUIS QUINTERO AMADOR Y CARMEN BEATRIZ BENAVENTA
 CORNIEL, venezolanos, mayores de edad y titulares de las cédulas de identidad Nº V15.629.099 y V-15.630.133. De este domicilio Municipio Autónomo El Pao de San Juan
 Bautista del Estado Cojedes.
 APODERADO JUDICIAL: RAMÓN DE JESÚS DÍAZ HERRERA, venezolano, mayor de edad,
 titular de la cedula de identidad, Nº V-3.044.039, inscrito en el Instituto de Previsión Social del
 Abogado (Inpreabogado) bajo el número 163.801.
 MOTIVO: DIVORCIO POR DESAFECTO.
 SENTENCIA: DEFINITIVA
 EXPEDIENTE Nº: 2022-1252
 SENTENCIA Nº: 438/2022
 FECHA: 19/07/2022
 -II-
 ANTECEDENTES
 En fecha ocho (08) de Junio del año 2022, se recibe a través del correo electrónico
 institucional, solicitud de Divorcio por Desafecto de cuatro (04) folios útiles y catorce (14)
 anexos, incoada por los ciudadanos SERGIO LUIS QUINTERO AMADOR Y CARMEN
 BEATRIZ BENAVENTA CORNIEL, titulares de las Cedulas de Identidad Nros. V-15.629.099
 y V-15.630.133. Asistidos por el Abogado en ejercicio RAMÓN DE JESÚS DÍAZ HERRERA
 venezolano, mayor de edad, titular de la cedula de identidad, Nº V-3.044.039, inscrito en el
 Instituto de Previsión Social del Abogado (Inpreabogado) bajo el número 163.801, correo
 electrónico: ramondiazhe@hotmail.com, teléfono: 0416-9941053, y recibida en este despacho
 en forma física el día ocho (08) de Junio del año 2022.
 En fecha diez de Junio (10) del 2022, se le dio entrada a la solicitud de Divorcio por
 Desafecto, por auto de fecha admitiéndose la misma y se acuerda librar boleta de notificación
 a la representación Fiscal IV del Ministerio Público con competencia en el Sistema de
 Protección del Niño, Niña y Adolescente de la circunscripción judicial del estado Cojedes.
 En fecha trece (13), de Junio del año 2022, se recibe en físico solicitud de Poder
 APUD ACTA, presentado por los ciudadanos SERGIO LUIS QUINTERO AMADOR Y
 CARMEN BEATRIZ BENAVENTA CORNIEL, titulares de las Cedula de Identidad Nº V15.629.099 y V-15.630.133, asistida por el Abg. RAMÓN DE JESÚS DÍAZ HERRERA
 venezolano, mayor de edad, titular de la cedula de identidad, Nº V-3.044.039, inscrito en el
 Instituto de Previsión Social del Abogado (Inpreabogado) bajo el número 163.801, a quien le
 concede dicho poder. En fecha catorce (14) de Junio del 2022, se acuerda agregar a las actas
 el referido poder.
 En fecha veintinueve (29) de Junio del año 2022, el ciudadano Alguacil titular,
 presentó diligencia mediante la cual consigna la boleta de notificación debidamente firmada
 por la fiscal IV del Ministerio Publico.
 En fecha doce (12) de Julio del 20212, el ciudadano Alguacil titular, presentó
 diligencia mediante la cual Oficio Nº 09-FP4-0293-2022-0, de fecha once (11) de Julio de
 Mayo del presente año, emanada de la Fiscalía Cuarta del Ministerio Publico, en la cual remite
 opinión favorable sobre la presente solicitud, en virtud de que se encuentran cumplidas las
 formalidades de la Ley, en esta misma fecha se agrega a los actas para que surtan los efectos
 legales consiguientes.
 -III-
 DE LA COMPETENCIA
 Respecto a la competencia para conocer de la presente solicitud de DIVORCIO POR
 DESAFECTO, se observa que, estableció la Resolución Nº 2009-006, de fecha 18/03/2009,
 la Sala Plena del Tribunal Supremo de Justicia, publicada en Gaceta Oficial 39.152 de fecha
 02/04/2009 en su artículo 3: “Los Juzgados de Municipio conocerán de forma exclusiva y
 excluyentes de todos los asuntos de jurisdicción voluntaria o no contenciosa en
 materia civil, mercantil, familia sin que participen niños, niñas y adolescentes, según
 las reglas ordinaria de la competencias por el territorio, y del cualquier otro de
 semejante naturaleza. En consecuencia, quedan sin efecto las competencias
 designadas por textos normativos preconstitucionales. Quedando incólume la
 competencia de materia de violencia contra la mujer tienen atribuida”.
 De la transcripción anterior, se evidencia que este tribunal tiene atribuida la
 competencia para conocer de la presente solicitud de Divorcio por Desafecto por ser esta de
 jurisdicción voluntaria o “no Contenciosa”. Así se establece.
 -IV-
 CONSIDERACIONES PARA DECIDIR
 Siendo la oportunidad procesal para decidir la solicitud de DIVORCIO POR
 DESAFECTO este Tribunal, observa lo siguiente.
 El matrimonio es la base fundamental de la familia, ya que un hombre y una mujer se
 asocian con obligaciones recíprocas, siendo su objeto esencial la creación de la familia.
 A su vez, la familia es la base fundamental de la sociedad, razón por la cual el Estado
 debe proteger al matrimonio y a la familia como asociación natural de la sociedad y como el
 espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas, conforme a lo establecido en
 los artículos 75 y 77 de nuestra Carta Magna.
 El matrimonio civil es una institución jurídica creada por el Legislador debido a que
 tradicionalmente la familia -célula fundamental de la sociedad- se constituye y se desarrolla en
 ella. Así, el ordenamiento jurídico venezolano, ha creado un conjunto de normas tendientes a
 proteger la integridad de dicha institución jurídica.
 En este sentido, se observa que el único acto jurídico válido que disuelve el
 matrimonio es el divorcio. Así tenemos, que el artículo 185 del Código Civil Venezolano,
 establece siete (7) causales, las cuales en un principio tenían un carácter taxativo, en donde
 una vez probadas en juicio, disuelven el vínculo conyugal, lo cual supone un juicio de carácter
 contencioso regulado en el artículo 754 y siguientes del Código de Procedimiento Civil.
 No obstante, mediante sentencia No. 693 de fecha dos (2) de junio de 2015, la Sala
 Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, con ponencia de la Magistrada Carmen
 Zuleta de Merchán, estableció el siguiente criterio interpretativo constitucional con carácter
 vinculante del artículo 185 del Código Civil Venezolano:
 “…las causales de divorcio contenidas en el artículo 185 del Código Civil no
 son taxativas, por lo cual cualquiera de los cónyuges podrá demandar el
 divorcio por las causales previstas en dicho artículo o por cualquier
 otra situación que estime impida la continuación de la vida en común,
 en los términos señalados en la sentencia Nº 446/2014, ampliamente citada
 en este fallo; incluyéndose el mutuo consentimiento.”
 De manera pues, que conforme a la nueva doctrina imperante del Tribunal Supremo
 de Justicia, se evidencia el carácter enunciativo que tienen las causales del divorcio
 contenidas en el artículo 185 del Código Civil.
 En este mismo sentido, mediante sentencia Nº. 1070, de fecha 9 de diciembre de
 2016, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, con ponencia del Magistrado
 Juan José Mendoza Jover, estableció el siguiente criterio interpretativo constitucional con
 carácter vinculante:
 “Por lo tanto, el matrimonio se erige como la voluntad de las partes, nacida
 del afecto, para lograr los fines de la vida en pareja y durante su lapso de
 vida constituir el pilar fundamental de la sociedad organizada: la familia.
 Así pues, en nuestra sociedad el contrato de matrimonio nace a través de un
 vínculo afectivo de libre consentimiento preexistente entre dos personas de
 distinto sexo, mediante el cual se genera una serie de derechos y deberes
 con el fin de realizar una vida en comunidad.
 Dentro de este orden de ideas, la institución romana del affectio maritalis
 trataba acerca de la voluntad de ser marido o de ser mujer, viniendo a ser el
 sustento fundamental del matrimonio, por lo que ha de ser continua y su
 ruptura desembocaba en el divorcio.
 Siendo así las cosas, el afecto, proveniente del latín affectus, refiere a un
 sentimiento, el cual es el resultado de las emociones, hacia a alguien o algo,
 especialmente de amor o cariño, por lo que podemos concluir que el afecto o
 cariño es la principal fuente del matrimonio y de su permanencia.
 Es de agregar, tal y como en la institución del afectito maritalis, dicho afecto
 que origina la unión de una pareja en matrimonio debe ser permanente, por
 cuanto éste es la fuente directa de la creación del contrato matrimonial y la
 existencia, de hecho, del vínculo marital depende de tal afecto.
 En este sentido, al momento en el cual perece el afecto y cariño ocurre el
 nacimiento del desafecto, el cual es definido por la Real Academia Española
 como la falta de estima por algo o alguien a quien se muestra desvío o
 indiferencia.
 Dicho desafecto consiste en la pérdida gradual del apego sentimental,
 habiendo de una disminución del interés por el otro, que conlleva a una
 sensación creciente de apatía, indiferencia y de alejamiento emocional, lo
 que con el tiempo lleva a que los sentimientos positivos que existían hacia el
 o la cónyuge cambien a sentimientos negativos o neutrales.
 …omissis…
 Es evidente entonces, que cuando aparece el fenómeno del desafecto o
 la incompatibilidad entre los cónyuges, resulta fracturado y acabado, de
 hecho, el vinculo matrimonial, por cuanto ya no existe el sentimiento
 afectuoso que originó dicha unión, más sin embargo, esto no implica que,
 desde el punto de vista jurídico se haya roto la unión matrimonial.
 Por lo tanto y en razón de encontrarse, de hecho, roto tal vínculo que originó
 el contrato de matrimonio, este no debe de seguir surtiendo efectos en el
 mundo jurídico, motivo por el cual no se puede someter a un procedimiento
 controversial al cónyuge que alegue o haga evidenciar el desafecto o la
 incompatibilidad de caracteres en su demanda de divorcio, pues esta Sala
 estando en franca sintonía con el respeto a los derechos constitucionales
 relativos a la libertad y el libre desenvolvimiento de la personalidad,
 desarrollados en la sentencia 693/2015, estableció la posibilidad de que la
 ruptura jurídica del vínculo matrimonial se pueda generar por causas no
 previstas en la legislación patria, es decir, que el desafecto y la
 incompatibilidad de caracteres, creadores de disfunciones en el matrimonio y
 la familia, siendo esta la base fundamental para el desarrollo de la sociedad,
 pueden ser alegados con el fin de obtener una sentencia que disuelva el
 vínculo jurídico que une a los cónyuges, para así lograr el desenvolvimiento
 efectivo de los principios, valores y derechos constitucionales que rigen la
 materia, así como la protección familia y de los hijos –si es el caso- habidos
 durante esa unión matrimonial en la cual se produjo el desafecto o la
 incompatibilidad señalada.
 …omissis…
 En consecuencia, considera esta Sala que con la manifestación de
 incompatibilidad o desafecto para con el otro cónyuge apareja la posibilidad
 del divorcio en las demandas presentadas a tenor de lo dispuesto en el
 artículo 185 y 185-A, que conforme al criterio vinculante de esta Sala no
 precisa de un contradictorio, ya que se alega y demuestra el profundo deseo
 de no seguir unido en matrimonio por parte del cónyuge-demandante, como
 manifestación de un sentimiento intrínseco de la persona, que difiere de las
 demandas de divorcio contenciosas.” (Negrillas de la Sala)
 De lo antes señalado, se colige que la institución del matrimonio se centra en el
 affectio maritales, referido a la voluntad de ser marido o de ser mujer, lo cual conlleva a un
 sentimiento positivo nacido de las emociones de amor y respeto mutuo de una persona
 hacia otra de distinto sexo, y viceversa, en donde prive el consentimiento, lo cual conlleva al
 libre desenvolvimiento de la personalidad, sentimiento el cual debe constituir la principal
 fuente y pilar de dicha institución jurídica, y por tanto el requisito sine qua non para su
 permanencia en el tiempo.
 Si bien, nuestro legislador en un principio estableció normas sustantivas y adjetivas
 tendientes a proteger la institución jurídica del matrimonio, la Sala Constitucional del
 Máximo Tribunal de la República, en su actividad progresista y pedagógica ha señalado que
 el consentimiento es un requisito indispensable no solo para contraer matrimonio, sino
 además para que éste perdure en el tiempo. Es por ello, que ha permitido acertadamente la
 invocación de otras causales para solicitar la disolución del vínculo conyugal, pues una
 determinada persona tiene el derecho a adquirir un estado civil distinto y/o de decidir formar
 una nueva familia.
 Así, entonces siendo el affectio maritales, esto es, el sentimiento positivo de amor de
 una persona hacia otra de distinto sexo, y el principal cimiento sobre el cual se constituye la
 unión matrimonial, puede pasar que con el transcurso del tiempo y/o la convivencia en
 pareja, uno de ellos o ambos gradualmente en su interior vaya transformando esos
 sentimientos positivos, en neutrales o negativos, en cuyo último caso, puede conllevar a que
 los cónyuges enfrenten situaciones conflictivas prolongadas, en donde el respeto mutuo y
 los demás deberes conyugales pueden verse afectados, a tal punto de verificarse
 frecuentemente o indefinidamente su incumplimiento.
 Debido a ello, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, enalteciendo el
 dinamismo del derecho, el cual debe ir a la par con la evolución de la sociedad, ha
 introducido en el Ordenamiento Jurídico Positivo Venezolano la modalidad del divorcio bajo
 la causal del desafecto, en cuyo caso -tal como se estableció en la ut supra decisión- su
 trámite no precisa de un contradictorio, ya que en este caso el cónyuge alega y demuestra
 el profundo deseo de no seguir unido en matrimonio, como manifestación de un sentimiento
 intrínseco de la persona, lo cual difiere de las demandas de divorcio de carácter
 contenciosas. En la norma bajo estudio. Al respecto observa:
 Primero: De los autos se evidencia, que los ciudadanos SERGIO LUIS QUINTERO
 AMADOR Y CARMEN BEATRIZ BENAVENTA CORNIEL, antes identificados, contrajeron
 matrimonio civil por ante el Registro Civil del Municipio Autónomo El Pao de San Juan
 Bautista, del Estado Cojedes, en fecha seis (06) de Diciembre año mil novecientos noventa y
 siete (1997), según consta en el acta de matrimonio inserta bajo Nº 44, tomo I, Folio Nº 136,
 vto, 137, consignada a tales efectos, en el folio seis (06), la cual posee pleno valor probatorio,
 por tratarse de un documento público, de conformidad con lo establecido en los artículos
 1.357, 1.359 y 1.360 del Código Civil, en concatenación con lo dispuesto en el
 encabezamiento del artículo 429 del Código de Procedimiento Civil; fijando como domicilio
 conyugal en el Sector “La Victoria” Intersección con la AV. Matías Salazar del Municipio El
 Pao, calle 04, casa Nº 028, Estado Cojedes., en el cual vivimos ininterrumpidamente hasta
 que su vida conyugal fue interrumpida el veinte (20) de Enero del año dos mil diecisiete
 (2017).
 Segundo: los solicitantes, admiten que se encuentran separados desde hace más de
 cinco (05) años. Situación que se ha mantenido y de la cual no existen posibilidades de
 reconciliación).
 Tercero: De igual forma, se observa que el cónyuge solicitante señaló que durante el
 vínculo matrimonial procrearon tres (03) hijos, mayores de edad, de los cuales se anexan,
 partidas de nacimientos, y sus respectivas copias de cedulas.
 Cuarto: Asimismo manifiesta que en cuanto a los bienes que liquidar, existen bienes
 adquiridos en su unión conyugal, los cuales serán declarados y compartidos en documento
 privado por los solicitantes.
 Quinto: Notificada como quedó la Fiscal Cuarta del Ministerio Público, la misma opinó
 favorablemente, sobre la presente solicitud.
 En virtud de lo anterior, y visto lo expuesto por los solicitantes, quien han manifestado
 su voluntad inequívoca de peticionar el divorcio fundamentado en la pérdida del affectio
 maritales; y considerando el criterio interpretativo constitucional con carácter vinculante que
 ha establecido la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, del artículo 185 del
 Código Civil, a través de la Sentencia No. 693 de fecha dos (2) de junio de 2015, en la cual
 permite a los cónyuges solicitar el Divorcio por cualquier otra causal, así como el criterio
 establecido con carácter vinculante en la decisión No. 1070, de fecha 9 de diciembre de 2016,
 dictada por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, y el Fiscal del Ministerio
 Público opinó favorablemente, en la presente; lo cual hace presumir a esta Sentenciadora,
 que no existe impedimento para la disolución del vínculo legal contraído por la cónyuge
 solicitante, concluye quien suscribe que se cumplieron los supuestos establecidos en la ley,
 para considerar PROCEDENTE en derecho solicitud de DIVORCIO POR DESAFECTO
 realizada por los ciudadanos SERGIO LUIS QUINTERO AMADOR Y CARMEN BEATRIZ
 BENAVENTA CORNIEL, antes identificado, fundamentado en el supuesto del desafecto. Así
 se decide.
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